28 de mayo de 2013

NALTRES 2011, D.O. Costers del Segre.



El primer vino tinto de la Cooperativa L'Olivera con D.O.Costers del Segre, el otro tinto que elaboran es el Primers Vins Negres, bajo la D.O. Catalunya.
Ambos, fieles a un mismo concepto de frutosidad, frescura y respeto a la expresión del terroir.


Naltres 2011, es un vino que recuerda en sus primeros lances a un buen Rioja de maceración carbónica, pero llegados a su plena expresión ofrece más y con potencial de mejora.




En su elaboración se ha empleado un 80% de Cabernet Sauvignon y el 20% restante, es la suma de variedades como la Garnacha, el Trepat y la Touriga Nacional (una portuguesa por "terres lleidatanes").
La fermentación tiene lugar en depósitos, con el grano entero, a una temperatura más propia de crianzas que de un vino con vocación de joven, a 25-28ºC. Esto, unido al hecho de que la garnacha (solamente) pasa por una crianza de 8 meses en roble, explica lo que después encontramos en el vino.


Presenta un color rubí de capa media, con presencia de tonalidades violáceas en el ribete.

En nariz domina la frutosidad, arándanos, moras, frambuesas, algún recuerdo floral y la nota muy Cabernet de pimientos escalibados.

En boca entra con una dominante frescura, volumen y mostrándose de nuevo muy frutoso. Postgusto largo "penalizado" quizás por un excesivo amargor final (pan muy tostado) que con el tiempo ha de suavizarse proporcionando una mayor redondez.

Recapitulando, un buen joven que tendrá una evolución muy positiva en el tiempo, y que además, tiene el valor añadido que le otorga la gran labor social, que realiza la cooperativa, con colectivos de personas que poseen alguna discapacidad psíquica, además de acciones en el ámbito de la integración y la terapia ocupacional.
Así que sobran los motivos para comprar y disfrutar de este o cualquiera de los otros excelentes vinos que elabora la Cooperativa L'Olivera.



27 de mayo de 2013

Siós Les Creus 2009, D.O. Costers del Segre




Desde Costers del Sió han conseguido un vino excelente, con una gran relación calidad-precio (~8€), que vale la pena probar.

El objetivo era obtener un crianza de corte moderno, donde primara el carácter frutal y la frescura.



  
Lo han logrado a través de la unión de la Tempranillo (85%) con la Garnacha (15%), y una crianza de 9 meses en barricas de 300 lts de roble francés. La posterior crianza en botella siempre será por un periodo superior a los 6 meses.

En un twit definía el vino como:

"Especiados y tostados sobre fondo de fruta madura. Goloso en boca."

En algunos vinos un "twit" se queda muy corto para describir todas las sensaciones que nos transmiten a todos los niveles, es el caso de este. Así que le haremos justicia y relataremos con mas detalle todo lo que nos ofrece a los sentidos.

Destacar el etiquetado de este Les Creus, y de todas las gamas de Costers del Sió, particularmente creo que han acertado con las novedades y los cambios.

A parte del acierto en la etiqueta, visualmente, nos gusta su color rojo-picota intenso de capa media, con un ribete que insinúa tonos marronosos.

En nariz, la fruta madura, que en la primera copa se mostraba en segundo plano, va ganando protagonismo para imponerse a las notas procedentes de la crianza, tostados, especiados, vainillas,...
Todo con una intensidad destacable.

En boca se nos muestra maduro, con volumen y goloso. En ningún caso esto se traduce en pesadez, mantiene frescura, con buena acidez y muy agradable al paladar.

Un vino que lo tiene todo para "triunfar", Calidad, Cualidades y Precio. Pero como en otros casos el triunfo está en "manos" de otros factores.

Si se lo cruzan, este Siós Les Creus 2009, merece ser comprado.

// Será un buen acompañante de carnes en general, y un arroz de carne en particular.
Servir a unos 16ºC //


20 de mayo de 2013

Trencaclosques 2012, D.O. Montsant.



Se presentaba una ocasión que requería de un rosado fresco, ágil, con boca amable, siendo sincero, de los que a mi no me gustan.

Justo debajo de casa hay una tienda de Altervinos (Terrassa), donde la gama de rosados no es muy amplia. (Sin embargo tienen referencias difíciles de encontrar en enotecas de la misma ciudad, punto a su favor)

Me llamó la atención este rosado, 100% Syrah, del Celler Pascona.
Sospechaba que no era el rosado que buscaba (pero que me gustaba). Así que me dejé convencer por el discurso de la responsable de la tienda abogando por la frutosidad de la Syrah.

Antes de describir a Trencaclosques, decir que estaba en lo cierto, este rosado es de los que me gustan.

El vino:
No entraré en descripciones, más o menos acertadas, sobre el color, la imagen es nítida y refleja con justicia las tonalidades de este rosado. El aspecto es atractivo, limpio y brillante.

La nariz no es menos atractiva que su aspecto, fresca, buena intensidad de frutos rojos, con un fondo herbáceo de los que encontramos en muchos (buenos) blancos, que lo dota de más frescura si cabe y le proporciona algo más de complejidad.


En boca domina una fresca frutosidad, con una acidez excelente. Buena estructura y volumen para un rosado. Final amargoso para acabar de equilibrar (a mi gusto) el conjunto. 

Recomendable rosado de Pascona, del que sólo se han comercializado 2500 botellas.
Su precio ronda los 8 euros. 




10 de mayo de 2013

Trossos Vells 2011, D.O. Montsant.

 
Este Trossos, al margen de gustos, es un vino honesto, con carácter propio y sin maquillajes.

Sus doce meses en roble francés no hacen más que definir y ensalzar la expresión de todo lo que la viña y la tierra nos ofrecen. No encontraremos, entre otras parafernalias, tostados y cremosidades exageradas.

A pesar de provenir de nueve pequeñas parcelas de Cariñenas viejas, con orientación, altitud y suelos diferentes, en cada sorbo dibuja un solo paisaje de suelos pobres y pizarrosos, de viñas viejas poco productivas, que se aferran a la vida ofreciéndonos a cambio su mejor fruto.
Al final lo que cuenta es la impresión que nos deja el vino al beberlo, mas allá de lo que refleje su etiqueta en cuanto a variedades, parcelas, crianzas y demás. El manejo por parte del enólogo, de estas "paletas de colores", forman el resultado final cual si fuere un cuadro.


Hablando de etiquetas, cabe anotar al respecto, que creer en cierta información reflejada en ellas, en algunos casos, supone un acto de Fe comparable a la de creer en deidades de religiones mono y politeístas.(Quizás he exagerado un poco, seguro, pero ya está escrito). Siempre me ha llamado la atención que, en casos muy concretos, nadie cuestione la veracidad del contenido de estas. No quisiera sembrar dudas sobre este aspecto, pero "haberlas haylas".

El vino


A la vista presenta un color picota de capa alta, virando a tonos amoratados conforme nos aproximamos al ribete. La lágrima tiñe con intensidad la copa.
En nariz, bajo una fruta roja-negra madura, aparece con afán de protagonismo una mineralidad excelente, acompañada de sotobosque mediterráneo, tabaco y liliáceas.
La entrada en boca es frutosa, con volumen (menor al que anticipa en nariz) y un punto de astringencia que no molesta. 
Buena acidez y buen equilibrio manejando sus 14º.

En definitiva me parece un excelente vino, no tan fácil y goloso como algunos lo pintan, y a un precio, que teniendo en cuenta su origen, materia prima y elaboración, es más que correcto, aproximadamente 16-18€.

Si se encuentran con una de las 5.843 botellas de Trossos Vells 2011, vale la pena probarlo.